

La composta se puede hacer utilizando los residuos de jardín y los restos de comida que se vierten a través de una puerta en la parte superior de cada módulo. Los diseñadores tomaron un simple proceso biológico para convertirlo en una alternativa viable (y gratis) para calentar los pequeños espacios públicos. El equipo de diseño está trabajando arduamente para resolver los detalles técnicos, tales como la forma adecuada para airear la composta, el control de la humedad, y mitigar los olores. Tienen la esperanza de construir un prototipo totalmente autosuficiente. Bakoko prevé que la estructura sea adecuada como punto de descanso en los grandes parques urbanos, jardines comunitarios, o incluso sirviendo como un café al aire libre – “en cualquier lugar que genere un suministro continuo de residuos orgánicos para el combustible”. Este diseño prototipo lo han llamado Comploo. Ojala todas las empresas constructoras empezasen a fijarse en este tipo de construcciones ecológicas , es el futuro.


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